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Concurso cuento corto: La Persona más Feliz del Mundo


 
La Persona más Feliz del Mundo

Por: Hizagui

Mientras Lina se medía el vestido de novia para su matrimonio, la señora que lo atendía puso el noticiero. Noticiero: Accidente catastrófico vía Cali - Yumbo.

Le pareció verlo en las imágenes. Corrió a su carro, y condujo a velocidades que nunca había alcanzado, estaba arriesgando su vida, pero no le importaba, sólo quería llegar y no encontrarlo.

Llegó en menos de 20 minutos, probablemente tenga varias multas por exceso de velocidad, pero en eso no pensaría sino hasta ver el correo. Parqueó en una gasolinera y corrió contra el tráfico hasta el accidente. Las piernas le temblaban, no podía respirar bien, su corazón latía más fuerte que el día que conoció a su ídolo musical: Noel Schajris. Esquivó dos policías y pasó bajo la cinta de amarilla que indica un accidente. Alguien la cogió del brazo y ella lo empujó, mientras gritaba: Perdón, necesito pasar.

Lo vio tirado a un lado de la acera, en el pasto, bajo la sombra. Su rostro se llenó de lagrimas y quedó paralizada, no pudo decir nada más, no podía respirar bien. Por su mente pasaron todos los recuerdos vividos a su lado. Un policía se paró en frente y le indicó que saliera, No, necesito verlo.

Lina. Se oyó una voz suave y cansada. Ella sintió como si el corazón se le detuviera, mucho más que hace unos seis meses cuando le propusieron matrimonio. ¿Lina?. Volvió a oírse la voz. Esquivó el policía y se arrodilló a su lado, en ese momento se dio cuenta que aún tenía puesto el vestido de novia, estaba destrozado, como su corazón. Aquí estoy, y lo abrazó, lágrimas brotaron de sus ojos, y se juntaron en la mejilla de él.

La imagen era tan conmovedora que los periodistas estaban encima de ellos capturando minuto a minuto el increíble encuentro de los novios, decían que al parecer ella se había quedado esperándolo en el altar hasta que vio el accidente y corrió a su encuentro. Alejandro, que estaba en su trabajo alcanzó a ver la noticia y no pudo evitar quedarse después de que Guillermo, su compañero de oficina, le dijera: Ve, ¿esa no es tu prometida?

¿Qué pasó? ¿Cómo te sientes?, Adolorido, pero bien, dijo mientras le acomodaba un mechón de pelo tras la oreja a Lina. Ella lo besó en la frente y se paró gritando: ¡Necesitamos una ambulancia por aquí! Él sólo le sonrió. Ella volvió a arrodillarse a su lado, Te voy a sacar de aquí ¿oíste?, Tranquila, hay personas más graves, No, nunca me perdonaría si te pasara algo, Te queda lindo el vestido, ella se quedó estática, pero se sonrojó al verlo sonreír, Te ves hermosa, le dijo mientras tomaba su mano para besarla, No sabes lo que sentí al verte así en televisión, sentí que se me acababa el mundo.

Con esa frase bastó para que Alejandro la llamara. Ella miró el celular y sintió pena, ¿Tu prometido?, asintió con la cabeza, Contéstale. Hola, Estoy viendo las noticias, sé que me amas, pero también sé que lo amas a él, y si todo lo que vivimos no fue suficiente para que dejaras de hacerlo, creo que tienes en el dedo el anillo del hombre equivocado, Alejandro, yo te amo, Lo sé, pero no lo suficiente, hubo un silencio incómodo, Pásamelo, se lo pasó, Mientras ella salva su mundo, destruye el mío, sólo quiero asegurarme de que tomó la decisión correcta, así que más te vale que la hagas la persona más feliz del mundo, porque ella te hará sentir así. Ella debe quedarse contigo, yo no la merezco, Tal vez, pero ella nunca me elegirá sobre ti. Lina lo miraba intrigada, con los ojos aguados. Él soltó el teléfono y la besó, como nunca antes lo había hecho, ambos sintieron esa magia del primer beso, sintieron como la llama del amor ardía en sus pechos tan fuerte que quemaba, se les fue el aliento, y mientras ella se recuperaba, el corazón de él daba su último latido.

Durante el accidente Él recibió golpes cruciales, y así poco a poco se fue desangrando. Él siempre lo supo, pero quería sentirse por última vez: la persona más feliz del mundo.

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